¿Un gesto o una necesidad? El Rey ha decidido renunciar al uso del yate Fortuna que le regalaron en el año 2000 , 25 empresarios de las Islas Baleares como agradecimiento a su apoyo al turismo y promoción del archipiélago.
Lo ha hecho, según fuentes oficiales, siguiendo la lógica de la austeridad que se ha impuesto en España como consecuencia de la crisis. Zarzuela no ha precisado cuánto cuesta mantenerlo, pero para que tengan una idea, nada más llenar el depósito cuesta 20.000 euros. Y tal y como están las cosas ni los bolsillos reales están para eso. Y menos ahora, cuando antes de final de año la Casa Real entrará a formar parte de la Ley de Trasparencia , la norma que obliga a todas las administraciones a ser de cristal
El Fortuna actual es el tercero del monarca, el primero fué un regalo de su suegro, y el anterior, de su gran amigo el rey Fahd de Arabia Saudí. Este con 41, 5 metros de eslora y valorado en 18 millones de euros, es uno de los más veloces de su categoría y ha servido para pasear y recibir a Jefes de Estado, Reyes y Príncipes. Todavía recuerdo a una joven Lady Di a bordo del anterior Fortuna en 1990.

El Fortuna ha sido uno de los grandes caprichos del Rey, gran aficionado a la navegación. Renunciar a él ,desde luego , no es ningún gesto altruista con los tiempos que corren, pero si es un nuevo gesto, por lo menos un gesto de buena voluntad, tal y como está el patio. Todavía estamos esperando que alguno de esos políticos corruptos pidan perdón o devuelvan algo al Patrimonio Nacional.